Agatha Cullen

Agatha Cullen

domingo, 31 de enero de 2010

Capitulo 7- Imprimación




Cuando estaba comiendo escuche que alguien entraba a la casa....

Era un chico de cabello negro, unos ojos negros que son capaces de Hipnotizar a cualquiera, largo y con un aspecto desgarbado.

-Hola, chi.....- no puedo terminar la frase. Se quedo paralizado al verme. Tengo que admitir que era guapo.- desde mi perspectiva - .

-Hola Seth... Seth?- pregunto Quil-

Pude escuchar como todos empezaban a murmurar cosas que no fui capaz de entender ya que estaba concentrada en mirar los ojos negros de ese chico. Pero pude entender que alguien dijo “¡¡huuuu!! ¡¡El niño se imprimo!!”

¿Imprimo?

¿Qué es eso? Lo único que savia en ese momento es que estaba totalmente hipnotizada por esos ojos tan bellos como la noche.

Estava sumida en mis pensamientos hasta que Emily interrumpió

-Seth, ¿te vas a quedar hay parado para siempre ó vas a comer?- pregunto Emily.- La comida se está enfriando.

-Ee-e-sta-bii-en- balbuceaba.

Se sentó en la mesa y aun nos seguíamos mirando. Como si fuéramos solamente nosotros dos los que estuviéramos en la mesa.

-Seth, ella es Agatha Cullen. Agatha el es Seth Clearwater.- dijo Emily, ya que vio que nosotros no estábamos como para Hablar.

-Encantado Agatha- dijo sonriendo.

Yo solamente pude sonreír y bajar la cabeza con las mejillas sonrojadas.

Cuando todos terminamos de comer, nos quedamos en la mesa charlando.

Estábamos hablando distraídamente cuando el ruido de alguien entrando a la casa nos distrajo – otra vez. -

Era Jacob

Ho-ho
-¿qué haces tú aquí?- pregunto con un tono de rabia, Jacob y yo no éramos “los mejores Amigos”, ya que a mí no me agradaba mucho su novia, Renesmee

-pues, me quede dormida en la playa y desperté aquí, así que cene con ellos.- dije con una sonrisa-.

-ha... pues es mejor que te vallas... por si no te diste cuenta ya son las 10 pm...- dijo Jacob levantando una ceja.

Abrí los ojos de par en par.

¡¡¿¿Las Diez de la noche??!!

Como se me pasaba el tiempo rápido.

- tengo que irme... ¡¡chao!!- dije desilusionada de ya no poder ver esos ojos que llevaban de dueño al hombre más hermoso de las faz de la tierra. Salí rápidamente de la casa de Sam y me dirigí a toda prisa a la mansión Cullen.

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